Wednesday 2 March 2011

María


No aparta esos ojazos pardos como almendras cubiertas de magnesio cuando las cosas se ponen feas. Es generosa sentimental y materialmente, bondadosa, con un amplio sentido de la justicia. Heredó los genes de satisfacer a quienes le rodean, pero mejoró la casta con unas firmes convicciones que la llevan en ocasiones a tomar decisiones que no necesariamente son del agrado de todos, algo que a nosotros nos ha costado cuarenta años y que todavía ejecutamos con notable dificultad. Adoro su media sonrisa apoyada en el hoyuelo de la mejilla izquierda, su contagiosa carcajada, su vital forma de entender los estudios, la lectura, el cine, la amistad, la familia… la vida. Es uno de los grandes alicientes de mi vida. Pensar en ella, contemplar su vitalidad, su verborrea cuando regreso del trabajo con ganas de dormir durante años es la mejor terapia que uno puede recibir. Y todo esto con 14 años. Felicidades María.

1 comment:

Anonymous said...

Muchísimas gracias papi, me ha costado lo soyu leerlo sin derramar una lágrima
Te Quiero,
María